Según el marco conceptual propuesto por Michael Porter, la competitividad de una empresa o grupo de empresas, se explica por cuatro atributos fundamentales de su ambiente local. Estos cuatro atributos y la interacción entre ellos explican por qué innovan y se mantienen competitivas las compañías que se ubican en regiones determinadas.
Se analizaran de forma general dichos atributos en primer lugar encontramos las condiciones de los factores, de esta forma encontramos que:
La teoría económica clásica de las ventajas comparativas sostiene que una nación o región es competitiva en determinada industria por su abundante dotación de factores básicos de producción: tierra, mano de obra y capital.
Alemania sobresale por ser una de las naciones más fuertes y competitivas no solo en Europa sino también a nivel mundial. La competitividad internacional de la economía alemana no se deriva únicamente del peso específico de las grandes empresas sino que responde asimismo al empuje de las decenas de miles de pequeñas y medianas empresas (hasta 500 empleados) industriales, en particular del ramo de la ingeniería mecánica y la industria auxiliar pero también de los florecientes sectores de futuro que son la nanotecnología y la biotecnología, los cuales con frecuencia se organizan en clústeres. Con más de 20 millones de trabajadores, el sector de las pymes es el mayor empleador del país. Es más, en un ramo puntero como la ingeniería mecánica, que produce equipos industriales de sobresaliente calidad a nivel mundial, la gran mayoría de las empresas incluso tiene menos de 200 trabajadores. En este segmento del mercado Alemania lidera el comercio mundial con el 19,3% de las exportaciones totales.
Por otro lado analizando factores fundamentales en la economía Alemana no se puede dejar de lado las políticas de Inversión y Desarrollo planteadas por el gobierno.
Teniendo en cuenta los elevados salarios, para las empresas alemanas resulta fundamental llevar la delantera a la competencia en la calidad de sus productos. En consecuencia, actualmente Alemania invierte cerca del 2,5% de su PIB en actividades de investigación y desarrollo (I+D), cifra muy superior a la media de la UE (1,9%). El Gobierno Federal tiene el propósito de aumentar los gastos de I+D al tres por ciento del PIB para el año 2010. Con cerca de 40 millardos de dólares Alemania registra asimismo el mayor nivel de inversión privada en I+D del mundo, solo por detrás de EE.UU. y Japón.
CONDICIONES DE LA DEMANDA
En un mundo dirigido hacia la globalización podría parecer que la demanda local es de menor importancia, sin embargo la evidencia demuestra lo contrario. La empresas más competitivas invariablemente cuentan con una demanda local que se encuentra entre las más desarrolladas y exigentes del mundo.
Clientes exigentes permiten que las empresas vislumbren y satisfagan necesidades emergentes y se convierten en otro incentivo a la innovación. Tener a estos clientes cerca permite que las empresas respondan más rápidamente, gracias a líneas de comunicación más cortas, mayor visibilidad y a la posibilidad de realizar proyectos conjuntos. Cuando los clientes locales anticipan o moldean las necesidades de otros países, las ventajas para las empresas locales son aún mayores.
Y para finalizar encontramos las alianzas estratégicas que en este caso se ven esplícitamente mencionadas tal como se nombro con anterioridad. Dichas alianzas estan dadas con las siguientes empresas:
- DISPANO S.A.
- IKEA GROUP
FUENTES
- PORTER, Michael. ESTRATEGIA Y VENTAJA COMPETITIVA. Ed. Deusto 2006
